YO SOY Uno en la Unidad.


YO SOY Uno en la Unidad
En el corazón de Dios
Dios YO SOY
Porque YO SOY Dios
Porque todo lo que Dios creo lo creo de su propia sustancia
Por lo tanto todo es Dios
YO SOY parte de ese todo
YO SOY Dios
YO SOY Uno
YO SOY la unidad
YO SOY la esfera de la unidad que abarca el cosmos
Renuncio a toda imagen de un Dios externo
Renuncio a toda imagen de un Dios en el Cielo
Renuncio a toda imagen de un Dios en un mensajero
y solo acepto la única verdad de que Dios está en mi

porque YO SOY Dios en su mas pura manifestación.

Yo estoy aquí y he venido a manifestar la plenitud

de mi amor y mi Luz a la tierra.
YO SOY el Jesús el Cristo, YO SOY el Cristo Jesús

en cada uno de vosotros, ya no me veáis afuera porqu

e yo siempre he estado adentro.
Rechazad vuestra mente carnal
que es la que os quiere hacer creer en los maestros externos

y en el Dios externo.
Yo he venido pero realmente siempre estuve aquí

porque soy uno en cada corazón que vibra
y en cada corazón que se abre.
Soy uno en el corazón del cosmos
Soy uno en vuestro propio corazón



SOMOS UNO

SOMOS UNO

lunes, 30 de agosto de 2010

El entusiasmo es una actitud

El entusiasmo es una actitud।
Por Dr. Alberto Villoldo EL ENTUSIASMO NOS IMPULSA, NOS LLENA DE OPTIMISMO Y NOS PERMITE FORJARNOS SUEÑOS POSIBLES DE ALCANZAR. Entusiasmo quiere decir "Dios adentro", y este antiguo significado nos dará una buena idea de la gran fuerza que esta palabra encierra. Vivir con entusiasmo significa estar lleno de espíritu positivo, de alegría y de ánimo.
El entusiasmo es una actitud.
Nosotros elegimos vivir aburridos o alegres, encontrar el lado gris o colorear de las cosas. Obviamente, a veces hay tareas o situaciones que no nos despiertan ningún tipo de entusiasmo, pero podemos buscarles el lado amable o positivo para estimularnos y realizarlas de la mejor manera posible. A veces el entusiasmo surge espontáneo y otras nos toca buscarlo. Hay veces en que sucede algo mágico y que surge desde muy dentro de nosotros mismos; es como un calambre que nos impulsa a seguir y seguir, a no dejarnos vencer hasta conseguir lo que nos hemos propuesto. Esa fuerza es positiva y alegre, tiene un nombre muy bonito: ¡ENTUSIASMO! La palabra entusiasmo es una palabra que salta, que corre, que se esfuerza, que disfruta. Cuando está activa, todo parece más sencillo y hasta lo imposible se vuelve más cercano. El entusiasmo es el ingrediente secreto que ha hecho que los hombres y las mujeres conquisten grandes sueños que parecían metas inalcanzables: Desde curar enfermedades, crear obras de arte, alcanzar la auto realización espiritual... Pero el entusiasmo también es necesario para vivir las pequeñas cosas de todos los días: Para ayudar en casa, para cumplir con nuestras obligaciones y que no nos parezcan pesadas, para terminar lo que empezamos... El entusiasmo no sólo impulsa a quien lo experimenta, sino que es muy contagioso. Si creemos que tenemos algo que necesitamos defender, que tenemos un proyecto que nos interesa sacar adelante o estamos trabajando por hacer algo que beneficie a los demás, seguramente encontraremos personas que querrán unirse a nuestro empeño y gran proyecto. Afortunadamente no hay vacuna para el entusiasmo, si todos aprendiéramos a disfrutar cada pequeña cosa que hacemos cotidianamente, viviríamos más felices y mucho más satisfechos con nosotros mismos. Sonrie La risa tiene poderes ... Ciertamente, cambia tu química, cambia tus ondas cerebrales, cambia tu inteligencia; te vuelves más inteligente. Las partes de tu mente que habían estado durmiendo, de repente se despiertan. La risa llega hasta lo más profundo de tu cerebro, de tu corazón. Un hombre de risa no puede sufrir un ataque al corazón. No es posible que un hombre de risa se suicide. La risa te vuelve más vivo y radiante, más creativo. Ahora, hasta la ciencia médica dice que la risa es una de las medicinas más penetrantes con que la naturaleza ha provisto al hombre. Si puedes reír cuando estás enfermo recuperarás antes la salud. Aun cuando estés sano, si no puedes reír, antes o después perderás tu salud y te pondrás enfermo. En unos pocos monasterios zen todo monje ha de iniciar la mañana riendo y ha de concluir la noche riendo: ¡lo primero y lo último!. Inténtalo. Es muy hermoso… Casi siempre he visto a la gente hacer justamente lo contrario. Desde bien temprano por la mañana se levantan de la cama quejándose, pesimistas, tristes, deprimidos, miserables. Entonces una cosa conduce a la otra –y por nada–, y se enfadan. Es algo muy malo porque cambia tu talante durante el resto del día, establece una pauta para todo el día… (Osho)

No hay comentarios:

Publicar un comentario